Magallanes: los Estrechos que faltan por descubrir a 500 años de la travesía
Texto del ministro Andrés Couve parte de libro "Estrecho de Magallanes: Ensayos", del cual participaron 24 personalidades de diversos ámbitos con ensayos reflexivos los sobre los 500 años de la travesía.
21 Octubre 2020
Hace cinco siglos, zarpar desde Andalucía en cinco naves de madera en busca de una nueva ruta hacia las Islas de las Especias, fue sin duda un emprendimiento que muchos miraron con desconfianza e incredulidad. El viaje fue largo y extremadamente duro para los navegantes; de los 250 tripulantes solo sobrevivieron 18. Ni el mismo Magallanes alcanzó a vivir para ser reconocido como líder de la hazaña de la primera circunnavegación del globo. Fueron tres años de navegación, desencuentros y rencuentros entre los miembros de la tripulación, tempestades feroces, hambre y sed, enfrentamientos con pueblos locales, costas y mares complejos de maniobrar.
El paso por el Estrecho que hoy lleva su nombre fue un hito para la tripulación. Tras surcar sus difíciles aguas, avistando fogatas y habitantes de imponente figura, un nuevo mundo se abrió ante sus ojos. La dificultad enfrentada fue razón suficiente para bautizar como Mar Pacífico a las aguas que los recibieron después de la travesía por el Estrecho.
Hoy celebramos 500 años de esta expedición que nos contagia con su espíritu en tiempos complejos y de alta incertidumbre, pero en los cuales nos guía la convicción de que la investigación, la tecnología y la innovación son piedras angulares del desarrollo que como país y región queremos alcanzar.
Inspirada en exploraciones y descubrimientos como los de Magallanes, la construcción del recientemente creado Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, con su sede austral en Punta Arenas se yergue en un momento clave de nuestra historia nacional. Nunca habíamos tenido tanta acumulación de conocimiento y, a la vez, tanta necesidad de activarlo para tomar decisiones que orienten y fortalezcan el desarrollo del territorio. Nuestro objetivo es claro “contribuir a trazar un camino propio que mejore la calidad de vida de las personas y aporte a un desarrollo sostenible e integral de Chile y sus territorios, a través de la ciencia, la tecnología, el conocimiento y la innovación”. Los desafíos institucionales de la instalación, el incansable diálogo entre diferentes posiciones científicas, las geografías que dibujan los diferentes actores regionales, nacionales e internacionales nos animan a cumplir con la promesa, de generar una nueva ruta, abrir nuevos horizontes para y desde Chile y Magallanes hacia el mundo.
En este aniversario de los 500 años de la travesía por el Estrecho de Magallanes, quiero agradecer a nuestra comunidad científica regional, a quienes trabajan en políticas públicas, a nuestros gestores tecnológicos, divulgadores de las ciencias, y a los emprendedores por poner sus talentos al servicio del país y, además, motivarlos a que juntos impulsemos grandes iniciativas para explorar y descubrir de la mano de nuestra ciencia. Desde la Región más austral de Chile, hoy celebramos el reconocimiento y la retribución a la curiosidad, la perseverancia y el tesón para abrir nuevas oportunidades para potenciar a la Región de Magallanes y La Antártica Chilena resolviendo sus brechas junto al conocimiento. Desde esta Región también nos preguntamos ¿cuáles son los Estrechos que faltan por descubrir y qué naves necesitamos para la exploración? Quizás aun más importante, ¿cuál es nuestra responsabilidad con los niños y niñas que serán los tripulantes que nos guiarán en ese futuro?
Andrés Couve Correa
Ministro de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación
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