Ministra de Ciencia participa en la instalación de la primera “Boya Inteligente” para el monitoreo de ballenas
El proyecto de alta relevancia internacional -patrocinado por MinCiencia- cuenta con la tecnología europea de vanguardia LIDO, que en tiempo real monitorea el impacto de las actividades humanas en ecosistemas marinos y terrestres.
14 Octubre 2022
Chile está innovando en materia de desarrollo sostenible y mitigación del cambio climático. En medio de este escenario, la Ministra de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación (MinCiencia), Silvia Díaz Acosta, participó en la instalación de la primera boya inteligente de Chile por The Blue BOAT Initiative, acción patrocinada por MinCiencia, que busca avanzar en soluciones concretas para la conservación de los océanos. El nombre de la Boya es “Suyai” y significa esperanza.
Se trata de una solución tecnológica con impacto en la economía azul, que podría convertirse en la herramienta para definir y monitorear las rutas oceánicas por medio del sonido de ballenas, incidiendo en la creación de áreas marinas protegidas. Debido a su magnitud y escalabilidad, el proyecto significa una de las soluciones concretas del Compromiso País 2022-2023 para la protección de los océanos.
Esta instalación permite conectar en Sudamérica el Primer Sistema de Alerta Temprana de presencia de ballenas que permitirá desviar el rumbo de las embarcaciones ante la presencia de los cetáceos para evitar colisiones, generando alertas a la Armada de Chile.
"Para nuestro Ministerio, esto es parte de una relación de colaboración público-privada donde hemos trabajado con la Fundación Meri en acciones relacionados con las Conferencias de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el cambio Climático, así como con actividades internacionales del Comité Científico Asesor en Cambio Climático”, destacó la ministra de Ciencia, Silvia Díaz.
La secretaria de Estado, agregó que desde el gobierno "entendemos la Ciencia y la Tecnología como las herramientas claves para conseguir soluciones eficientes e innovadoras a las grandes tareas que nos impone nuestra época, siendo una de estas grandes tareas la de avanzar hacia un nuevo modelo de desarrollo, en el marco de una transición socioecológica justa", dijo.
La actividad, que se inició en el edificio del CECREA de Castro, perteneciente al Ministerio de las Culturas, contó también con la presencia de la Ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas; la seremi de Ciencia de la Macrozona Sur, Maite Castro, el Alcalde de Castro, Juan Eduardo Vera; el Contraalmirante de la Armada, Juan Gajardo; Francisca Cortés Solari, Presidenta Ejecutiva de Fundación MERI; Sonia Español Jiménez, Directora Ejecutiva de Fundación MERI y de The Blue BOAT; Michel André y Mike van der Schaar, director y director técnico, respectivamente, del Laboratorio de Aplicaciones Bioacústicas de la Universitat Politècnica de Catalunya - BarcelonaTech (UPC); el Encargado Nacional de la Unidad de Conservación y Biodiversidad de SERNAPESCA, Ricardo Sáez, institución que jugó un rol clave en las Mesas Técnicas para este proyecto, y referentes internacionales en materia oceánica como Stan Rowland, CEO de Blue Climate Initiative, entre otros.
Desde el evento, la seremi de Ciencia, Maite Castro, comentó que “este es un proyecto muy relevante en estos territorios, particularmente en la región de Los Lagos, porque nos permite atraer más capital humano, el desarrollo de la ciencia y la tecnología e incentivar a los jóvenes de la región, a interesarse y prepararse para hacer ciencia pensando en proteger el medio ambiente”, destacó.
En la instancia se dio cuenta de los objetivos y escalabilidad del proyecto, así como de la importancia de la conservación de los océanos con la exposición acústica “Sumérgete en el Sonido”, que quedará a disposición de la ciudadanía hasta el domingo 15 de enero de 2023.
Para Francisca Cortés, presidenta ejecutiva de Fundación MERI “la colaboración entre el sector público, privado y sociedad civil. No existe ninguna posibilidad de que avancemos hacia soluciones sostenibles sin la concurrencia de todas las partes. Por lo mismo, agradezco a las autoridades presentes y anteriores, así como a la comunidad científica y sociedad civil que ha sido parte esencial de este proyecto”, manifestó.
Posteriormente, las autoridades e invitados navegaron en altamar a la altura de en el Golfo Corcovado, para alzar la bandera chilena sobre la primera “boya inteligente” de The Blue BOAT Initiative y ponerla en marcha con la transmisión de señales en vivo.
En promedio, cada ballena azul captura 33 toneladas de carbono a lo largo de su vida. Este denominado “servicio ecosistémico marino” reduce la presencia en la atmósfera de uno de los principales gases causantes del Cambio Climático. Sin embargo, estas especies clave para enfrentar la crisis climática, por ser una especie paragua, viven en constante amenaza por la actividad humana, en particular, el tráfico marítimo.
Por su parte, la Ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, explicó que “las ballenas son verdaderas ingenieras de ecosistemas, especies clave para el bienestar de los océanos y en el combate al cambio climático. Debemos considerar que se estima que en esta zona están presentes al menos el 10% de las ballenas azules de todo el mundo. Nuestro compromiso con la biodiversidad y con el planeta es darle la mayor protección que podamos”, explicó la autoridad.
AVANZANDO HACIA UNA REGULACIÓN MARÍTIMA
Actualmente, el 90% de las mercancías a nivel mundial es transportada por los océanos. Estas embarcaciones son cada vez de mayor tamaño y más rápidas, aumentando la amenaza para las ballenas.
El impacto acústico de la actividad humana en los ecosistemas marinos, puede causar desorientación, lesiones auditivas, afectación de la comunicación básica entre distintas especies, repercutiendo directamente en su alimentación o reproducción, y también lesiones auditivas, varamiento o incluso la muerte.
La evidencia científica sugiere la importancia de avanzar hacia una regulación marítima que permita, por una parte, poner fin a las colisiones entre embarcaciones y ballenas, y por otra, reducir el ruido que estas generan.
Entre sus funciones, las boyas permiten desviar el rumbo de las embarcaciones ante la presencia de ballenas para evitar colisiones con estos cetáceos, generando alertas a la Armada de Chile y permiten el monitoreo de la biodiversidad marina y la realización de estudios oceanográficos y acústicos.
Además, cuentan con sensores de temperatura, pH, salinidad, nutrientes, clorofila (a través de un fluorímetro) y oxígeno disuelto, para que registren las variaciones y sirvan de indicadores del cambio climático en los océanos.
LIDO: UNA TECNOLOGÍA DE VANGUARDIA
Las boyas inteligentes están equipadas con hidrófonos, sensores oceanográficos y transmisores con la tecnología Listen To The Deep Ocean (LIDO), la cual permitirá desarrollar un mapeo acústico en tiempo real del hábitat marino y de su biodiversidad, tanto como monitorear los efectos de actividades humanas sobre los ecosistemas naturales.
Ademas, será posible coordinar al mismo tiempo hidrófonos múltiples y realizar un seguimiento de los mamíferos marinos, como las ballenas, a una gran distancia.
Las señales que emita la “boya inteligente” en el Golfo Corcovado serán recibidas en línea por la Armada de Chile, que será la institución encargada de alertar a las embarcaciones de la presencia de ballenas para el desvío de la ruta o la disminución de velocidad de los navíos.
Más información en www.theblueboatinitiative.org